Las Cerezas de Corella

Me he "barruntau" que por las fechas que corren, os iba a apetecer que tocara este tema. Esta vez también os voy a sorprender -  ¡tengo cerezas! - y "a mansalva", además buenas de cojotios, eso lo sabe todo el mundo, pero a los lectores forasteros se lo tengo "queizir", son bonitas, sabrosas y gordas, que mas se puede pedir. En esta época del año cosa mas rica no hay, ¡bueno! "nos amolau", hay muchas,  pero en este caso lo que mas apetece son unas buenas cerezas recién cogidas de mi campo del Carasol, hay mucha gente que comparte esta opinión y también les gusta compartir las cerezas del "mendas".

Maravillosa rama en el "Carasol"

"Jomíos", imagino que todos pensáis que la cereza viene de Corella, ¡pues no!, el origen dicen, surge en las cercanías del Mar Caspio y del Mar Negro, yo también creía que todo lo bueno venia de Corella, como somos así de espléndidos dejamos que algunos productos vengan de fuera, pero solo unos cuantos. Es de la familia de las Rosáceas, el llamado Prunus Avium, de todos modos en Corella le seguimos llamando El Cerezo y La Cereza así que o hablan claro o no nos vamos a entender.

"Quia", cuanta la historia que desde esas lejanas tierras se fue extendiendo su cultivo hacia occidente, "quizir", "paquí", como siempre los griegos y los romanos lo divulgaron por doquier, yo creo que además de esa ilustre gente, algún "gurrión" u otro "homínido cagarruciense" realizase una distribución muy homogénea de los huesitos por el globo terráqueo.

"Aguarte", Os voy a contar una historia que me relató mi amigo el "confitusdeo", que se quede entre nosotros, cuando el emperador Trajano "El Hispano" quiso conquistar la Dacia, allá por el año 98 después de Cristo, hizo llamar a uno de Corella, famoso y conocido en su tiempo por su valentía, temple y como arrancaba en las jotas, le llamaban "El Corellano Jotabrava", todo le "sacaba de quicio", un autentico "vinagres". A "refunfuñones" dejó la partida de "pitones" que estaba jugando en el "mercao", sabia que tendría que dejar su huerta de la "Recueja" y reunir a su Legión, la temible y aguerrida "Cardus Apius Acelgus", comandada por "El Alabardero El Tío Quintín" y acompañado por "Juan Cruz El Cachena con su Palio" y el inigualable "El del Loden". "Juuuuntos como hermaaanos, mieeeeembros de una Igleeeeeesia, vaaaamos caminaaaaando, al encueeeeeeentro deeeeeel terrooooooorr". "Ataros los machos". Era el temido grito de guerra.

Gordas Gordas

"En un memento", se despidieron de las "mozas", pasaron la "aldaba" al portón de la cuadra y pusieron rumbo a la Dacia con sus "monociclos" y "velosoles", días antes hicieron la puesta a punto de todo el material, el "Tío Peludo", "El Santamaría"  y "El Tío Pele" se encargaron del transporte, "El Tío Peña" no daba a vasto haciendo alpargatas de guerra y los mas habilidosos no paraban de hacer "perigallos".

"Tevuacontar", pusieron rumbo a la aventura, la ruta iba a ser difícil y dura, mucha "costera" había, todo el mundo llevaba "la manta el macho", sabían que por esas tierras hacia buena "rasca" y el aire "rebocaba" mucho. Cuenta la leyenda que uno de Corella con raros "andares", puso de moda en esa época un abrigo llamado "loden", nadie sabe en que bazar de "ganao" compró dicho vestuario, dicen que nuestros legionarios no pararon de reír hasta las cercanías del Danubio. "Cayó piedra", creo saber de quien hablan, yo en persona he compartido y sufrido multiples aventuras con el aludido, mientras hacia uso de su característico "loden".

"Asabelo", nuestras Cohortes no paraban de" estozolar" y "descuajeringar" a los Dacios, la Alabarda del Tio Quintín diezmaba a los barbaros, el Palio que graciosamente manejaba Juan Cruz el Cachena aturdía y confundía a nuestros enemigos y "paqué contate" la "estroza" que estaba haciendo la Cimitarra de nuestro amigo "El del Loden". Andaba "El Corellano Jotabrava" guerreando con el borrico de Decébalo, cuando en un determinado momento de la lucha, "Miaaaloooooo", soltó su "perigallo" y dirigiendo su mirada a la frondosidad del bosque vio algo que le llamo la atención, era un fruto redondo, reluciente, gordo como la del "bolo del paseo", se quedó meditabundo, "modorro" pensando que era aquello tan llamativo, poco le duró esa ausencia, tuvo que volver a la lucha ya que Decébalo el borrico le estaba atizando con una porra de 226 Kg. en la taba juanete del pie izquierdo, mientras nuestro heroe intentaba sacar el pié dulcemente de la inmensa porra, este le dijo ¡"aguarte penco"!, arranco con la jota brava "Quisieraaaaa, Quisieraaaaa, volverme hiedraaaaaa", "Sanseacabó", Decebalo quedó aturdido, aprovechando este momento de estupidez le dio un "pico retorcido" en las ingles, y ahí no pudo mas el Dacio,  la batalla había concluido. Volvió de nuevo la mirada hacia el fruto y pensó que esa preciosidad bien merecía la pena y debía ser trasladado hasta su Corella natal. No tuvo mas remedio que mirarse el pie y ver el "chandrio" que le había hecho el "chindol" de Decébalo.

A "mansalva"

"Amos", todo se iba tranquilizando en la Dacia, el "cantamañanas" de Decébalo quiso aprender a tocar la Bandurria e hizo el curso superior de jotas en la "Escuela de Jotas Miguel Gravalos". Poco mas se podía hacer, las Legiones se pusieron en marcha, se tomó el camino de vuelta a casa, las Cohortes Corellanas llenas de alegría y jubilo determinaron trasladar con mimo y sumo cuidado tan ansiado fruto. Nada mas cruzar los Carpatos el legionario "Mambrú" ya se había comido un "corportón" de cerezas, "quioizír", unos 425 Kg., al llegar al Danubio no tuvieron mas remedio que darle una lección, "ponerlo de cogote" y hacerle unas "aguadillas" era lo peor que le podían hacer, a ver si paraba, "paice" que se dio por vencido al verse lleno de "valrrana". Pena que las pocas cerezas que quedaron durante el regreso se iban "reviniendo", así que hubo que tomar una decisión inteligente, los legionarios comerían las cerezas sabiendo que deberían aguantar sin "hacer de vientre" hasta Corella.

Conforme se iban acercando a la ciudad, vieron que allí en lo alto del torreón principal ondeaba el estandarte de nuestra ciudad, el recibimiento fue triunfal, vaya" tresena" de héroes, junto al "Jotabrava" estaba nuestro Alabardero "El Tío Quintín" lanzando salvas de honor, le acompañaba "Juan Cruz el Cachena" ondeando su Palio y dando gritos de alegría al ver como sus conciudadanos volvían todos sanos de tan peligrosa aventura. "Loquetienequenó", nuestro amigo el del "Loden" se "esbaró" en las escalinatas del torreón, tiró 7 tinajas, 14 jarrones y 6 tapices, le "escachó" la cabeza a un vecino, y todo culpa de unos "sebago" que se empeñó en comprarse en la Dacia, un autentico "talabarte".

Traslado a casa, "pa" postre

"Agarraisus", la entrada a la ciudad fue digna de mención, Plinio el Joven en su Epistulae refleja como las Cohortes Corellanas bajo un "calabobos" cansino, "arremangaus" y "chapulcando" al cruzar "el Río Mayor", entraron trinfantes en la ciudad; destaca en su alocución el "imbión" que el del "loden" le metió al "Alabardero Tío Quintín", -sin querer se entiende-. Esa épica memorable cientos de años después se vio reflejada en una maravillosa película - Gladiator -, allí narran como "El Corellano Jotabrava" junto a sus fieles legionarios vuelven victoriosos de las guerras de la Dacia, una maravillosa historia que no debemos de olvidar. "mentiendesloquetequierodecir".

"Aloquiba", por estos hechos y otros mas que no os pienso contar, hemos sido merecedores de tener las mejores cerezas del mundo, si, ¡que pasa!. No solo yo, todo Corella, incluso "El Zurri" tiene excelentes cerezas, dicen que gracias a un ancestro que trajo su correspondiente hueso de la Dacia, en una "Derbi Coyote" dicen.

El primer recuerdo que tengo de este fruto es, acabar la escuela e ir corriendo con los amigos a "robar cerezas", era un autentico "pedrea", duraban menos "que la aguada de cañete", el segundo recuerdo es ya en el campo de mi abuelo Isidro "El Garraldilla", cerca del Villar, en el termino de "Socañete", la recogida de las cerezas era cuestión familiar, íbamos todos a por ellas, había que ayudar y ahora pasa lo mismo. Me acuerdo perfectamente que íbamos a la recogida con el "macho" y todos"montaus" en el remolque, en esa época el remolque ya era de hierro y ruedas de goma.

Mis abuelos y mi tio

El huerto lo tenia debajo de "la balsa de los frailes" y el acceso era a través de un camino estrecho, así que el remolque se quedaba arriba, todo el día trabajando en el huerto de cerezos y subiendo cajas de cerezas en un arnés tipo esportizo pero con tablas, se llamaban "angarillas",  cargábamos de cerezas los "cunachos", estos eran fabricados con tiras de madera de castaño, estos a su vez se descargaban en "barquillas" de madera y a subirlas al remolque; de ahí al almacén del comprador de fruta con el que mi abuelo había llegado a un acuerdo, "El Mariico", "El Pajilla", "El Bizcochero", etc.

En la foto de al lado podéis ver a mi abuelo Isidro, mi abuela Cruzita y mi tio Benitín en la caseta de "Socañete". Fijaros en los "cunachos" de la época.

"Yatilidicho", Allí pasábamos todo el día, menos mal que tenía una caseta para cobijarnos del sol, allí se almorzaba, se comía y para postre cerezas. La recogida tenia lo suyo, recuerdo unos bancos enormes de madera pintados en rojo para poder alcanzar las "cogotas", los "pozales" con una cuerda atada a una horquilla hecha de madera y que colgábamos en las ramas del árbol, después había unas varas largas acabadas en "V"  invertida que se usaban para poder acercar las ramas altas y bajarlas cerca del suelo, de ese modo resultaba mas fácil la recogida. Cuando tenias lleno el "pozal" llamabas al de al lado y le decías "apara", significaba que ibas a vaciar. La época de la cereza era como la de la oliva o la vendimia, todo el pueblo participaba en la recolección, creo que hasta a los críos nos dejaban hacer "juina" para ayudar en casa. No "dabas de mano" nunca.

"Sandiez", la historia de la cereza ha cambiado mucho en estos años, "antesmas" el sabor de las cerezas era otra cosa, creo tener el recuerdo del gusto, no tienen nada que ver con las de ahora, pasa lo mismo que con los espárragos. Todos sabíamos que primero venia la "Cereza del Cristal", después la "Cereza Agre", después la "Cereza Pinta" y por ultimo la "Cereza Dura" y había una cosa cojonuda "Las Guindas Garrafales", ahora tenemos la "McAllister", "McMurdok", "Buchindangen", "Summiterfingem", "Andrajosum", "Calindrajo" y la "Trepanator", no hay Dios quien se aclare, como las de antaño ninguna, ¡a donde hemos llegado!, ¡que ha pasado con nosotros!, ¡de donde coño nos traen los huesos de cereza ahora!, ¡donde quedan nuestros ilustres gladiadores con el hueso de cereza en el vientre!, "demontres", si levantara cabeza nuestro "Corellano Jotabrava".

Queridos amigos, una vez mas, agradecer vuestro seguimiento y también vuestros cariñosos comentarios, intentaré cambiar de temas dependiendo del estado de animo en el que me encuentre. Quiero significar que no es mi intención ofender a gentes que nombro en este blog, todo lo contrario, quiero rendirles homenaje como a cualquier otro miembro de nuestra ciudad.