Los Ajos de Corella

Ajos de Corella

¡Siiiiiiiii!, los Ajos son de Corella, ¡Y que pasa pues!, tanta tontería que si de allí o de allá, ¡de Corella de toda la vida! "Cojotios". Ya os he dicho en comunicaciones anteriores que a los de Corella se nos bautiza con una "rastra" de Ajos al cuello.

"Fijaos" en una cosa, "naide" sabe de donde procede el tubérculo, excepto los de Corella, todo el pueblo conoce la historia, pero como este blog también lo lee gente de fuera, me han pedido que la cuente. Tranquilos Corellanos que no cuento todo, siempre dejo lo mas importante para la imaginación de cada uno.

"Rastras de Ajos"

Cuenta la leyenda, que uno de Corella en las huertas de "Fonique", empezó a hacer pruebas y alguna que otra tontería con el cultivo de la cebolla, "réite, réite", que si le echaba mas tierra, que si la ponía "pabajo", "parriba", total que un día dijo, "vuaechale" "puencima" un poco de agua de la "Fuente el Piojo", "equilicuá", a las semanas vio como la cebolla se había convertido  en algo mas duro, compacto y con dientes, dijo "meeecáá", le dio un "bocau" "paprobalo" y ahí mismo al echar un "regloto" se le cayeron todas las muelas, ni con "pegamín" consiguieron arreglarle la "estroza", el apodo de sus descendientes todavía se oye en Corella, "Los Dientadura".

Secando

"Quiazer" que no correrse la noticia por el pueblo, no sabeis la de "correveidiles" que había por entonces, "no te giba", lo primero que aprendieron a base de quedarse sin muelas es a no comerlo de un mordisco, después de la aparición de varios "desdentaus", intuyeron que ese tubérculo no era "pa" bromas, un mal uso podía originar un verdadero "chandrio" y nos podían dar unas buenas "pampurrias", aprendieron a echarlo a "piazos" pequeños como aliño y condimento de nuestros típicos platos. 

"No hay campana sin badajo, ni sopa buena sin ajo".
"Quiadacer", eso ocurrió hace muchos siglos, ya en la época de Teobaldo II, Rey de Navarra, "La Fermina" estaba con las reformas de la tienda y "Al Prudencio" le estaban haciendo el carromato. Los de Corella éramos conocidos, "me paice a mi", no solo por el aliento, sino por la mala hostia que gastábamos en las guerras,  no podían con nosotros, siempre nos llevaban de avanzadilla, "pa" vinagres los nuestros, éramos un autentico peligro, nuestro grito de guerra "me cagüeeen sos" resultaba aterrador, "pior pa ellos".
Conocedor del poderío de las Cohortes Corellanas, el Rey Jaime I de Aragón nos hizo llamar para la conquista de Morella, en esos años en manos moras. ¡"Amos"!, que quería conquistar Valencia el "cagansias".

Ajos de la Huerta de Isidro

"Con pan y ajo crudo, se anda seguro".
Una mañana temprano después de desayunar un buen "caústico" en la Hospedería Virgen del Villar y asistir a misa con nuestra querida Patrona La Virgen del Villar, son bendecidas nuestras Cohortes pasando "redodillas" bajo el Manto de la Virgen, estos parten jubilosos hacía la gloria comandados por nuestro "Corellano Jotabrava y su Perigallo", le sigue muy de cerca y bien tieso "El Alabardero el Tío Quintín", escoltado por "Juan Cruz el Cachena con su Palio".


"Aguarte", no muy lejos de allí, nuestro amigo "El del Loden" al iniciar la marcha y haciendo alarde de su capa, realiza un inesperado giro en "corroncho", -"cayó piedra"-, "ni velo", le mete el "pespunte" en el ojo al "macero", con tan mala suerte que este deja caer la gran maza que portaba de 225 Kg, todos asistimos estupefactos el ver caer tan gigantesco "almendruco" lentamente y con delicadeza sobre la "taba" del prior del convento, que estaba "a lau" del "macero".

Clavo-Cordel-Clavo

Se oyó un fuerte "jolín" y un "saldaí" "moscatelón". Asustado por el "aspaviento" y la poca educación del prior, nuestro querido amigo "El del Loden" queriendo retirarse con gracejo y sin llamar la atención, al primer paso se le atasca el "seladiz" de los "sebago" en una "templadera", dando un "pas de deux" con  "portée" y "cabriole double", pero al intentar hacer el "demí-plié"  final, su Cimitarra de 2 metros de longitud y 68 Kg de peso sale despedida en dirección desconocida, cuenta la leyenda y no me "marro" nada que la encontraron  por "Socañete" clavada en el anca de la borrica del "Tio Rafachel". "Tino" tenía un rato.

Esto viene a razón y a modo de explicar porqué la salida del pueblo fue tan rauda y veloz, y porqué llegaron tan rápido a Morella. ¡A lo que iba!, nada mas verles llegar, los moros "refunfuñaron" y salieron "escopetiaus", era por el año de 1232, "ridiez", el eco del valor de nuestras cohortes volaba, los moros "engrangenaus" se echan por el "terraplén" y no paran de dar "voltetas" hasta Peñiscola, ahí los dejamos que aguantaran unas semanas mas, como estaba "nublo" nos dimos una vuelta por la Occitania Francesa para fastidiar a los "mostrencos" de los franceses. También hicimos una "estroza". Que manera de "dailes". "¡Cojona!" como nos apreciaba y quería Jaime I, la de Calderillos y Tomatadas que hicimos con el.

Van creciendo

"Ajo, Sal y Pimiento y lo demás es cuento"
Estando en Cambrils asistiendo a un concierto de Giorgi Dan y a la vez descansando, aparece un día un tipo bastante raro, como un "dola", le llamaban Marco Polo, algo "mustio", llevaba unas bermudas  Meiba horrorosas, era el verano de 1270 y nos acababan de dar la noticia que nuestro Teobaldo II la había "cascau". Amén.

"Odo, petaca", conocedor el listo, de las bondades de nuestro tubérculo y en puertas de viajar hacia el exterior sin nada bueno que llevar, nos pidió con mucha amabilidad que le acompañáramos y que lleváramos unas cuantas "rastras" de ajos.

 "Sandiez", total unos meses después y entrado el año de 1271, en un "memento" cogen la barca del Pirata Patapalo y todos para Venecia, allí desayunan y se van "cagando hostias" para Constantinopla, nuestro amigo "El del Loden"  acababa de hundir 14 góndolas en el atraque de la barca, hacen noche y parten para Siria, a partir de ahí, todos en "riola" y en borrico, da inicio la famosa y renombrada epopeya de nuestros queridos amigos Corellanos - "La Ruta del Ajo".

Ajos de la Huerta de Isidro

¡Siiiiiiiii!, lo que estáis leyendo. No es nada "revisculeao". Desde Siria fuimos extendiendo el cultivo del Ajo por todos los sitios que pasábamos, hasta llegar a China, allí nos hicimos amigos del Kublai Khan y le dijimos que cogiera de consejero a Marco Polo. Dio las gracias y dijimos "naidequé".

"Que se eu", todo iba bien, demasiado bien, nos relacionábamos con los chinos de maravilla, les dimos la idea de "La Gran Paretilla", que posteriormente se convertiría en La Gran Muralla, las tribus del norte estaban muy "cansinas" y tuvimos que hacer algo, también les enseñamos a lanzar "esplotos" y "cuetes", el manejo del "perigallo", y lo de las tiendas de chinos también es nuestro, "quizir", "somos la hostia".


Y decía que todo iba bien, hasta que nuestro amigo "El del Loden" se apunto a una demostración de artes marciales y samurais, "quetevuacontar", mira que todos le dijimos que no se lo tomase en serio, que era un juego, "puesná", cuando le tocó el "rolde" casi acaba con el Imperio Mongol, nunca se había visto tanto "colotrón", cosa mas peligrosa que el y su Cimitarra no hay, "ni ha de habelo", todo ello junto a los destrozos que a su paso ocasionaba su capa loden, "quia", hizo que las Cohortes Corellanas pusieran los pies en polvorosa y tomaran el camino de regreso "cagando hostias".

Bancos para las "Rastras"

La vuelta fue dura, pero a la vez productiva, conocedores de la importancia de los gusanos de seda en China y de la fabricación de esas telas tan maravillosas, pillamos la idea y creamos "La Ruta de la Seda", "quizir", a la ida "La Ruta del Ajo", y a la vuelta "La Ruta de la Seda", mas listos que los "ratoncillos coloraus". 

De ahí que vosotros, doctos e insignes lectores caeréis facilmente en el engaño de creer que el Ajo viene de Asia, "na de na", lo llevamos los de Corella y además trajimos la seda a Europa, "mentiendesloquetequierodecir".

¿¡Que pasa puesssssss!, que son tan buenos los Ajos de Corella?

Pues la primera razón es la que os he contado de la "Fuente el Piojo", el agua de ese manantial es fundamental, después hemos ido seleccionando el producto y dejando las mejores "cabezas" para criar, así hemos conseguido crear los de Corella una "delicatessen" gastronómica.

Hendiduras para hacer las "Rastras"

"A quien ajo come y vino bebe, la víbora no le puede".
La aventura del cultivo del Ajo da comienzo con la preparación del terreno, tiene que ser distinto al del año anterior, "quizir", otro, no hay que cansar la tierra, que respire, que se le vayan los humos.

La abonamos con el "fiemo" de toda la vida, en mi caso "carajones" de caballo y laboreamos la tierra con la "Vigorosa", tiene que estar bien esponjosa, ida y vuelta, ida y vuelta y al "aragüey".

Una vez la tierra preparada y bien lisa, tiramos de Clavo-Cordel-Clavo para que las "rencles" sean lo mas rectas posibles, no nos gusta nada torcido, damos la distancia precisa tanto de "rencle a rencle" como de diente de Ajo a diente de Ajo, ¡secreto!, eso no os lo pienso decir. Actualmente en Corella existen "Los Ajos Chinos", "Los Ajos Franceses" y "Los Ajos de Corella". El que quiera poner "Ajos Chinos" la siembra es para Septiembre, Octubre, y "Los Ajos de Corella" se siembran en Noviembre, Diciembre y Enero. De "Los Franceses" ni hablo.

"Enrrastrando"

"Por San Martín el ajero, siembra ajos con el dedo". 
De semilla también cambiamos, "quizir", no utilizamos la recogida el año anterior, eso si, siempre de Corella pero de otra rama familiar, se nos "bordenquean" mucho si repetimos con las mismas "cabezas".

Siguiendo el cordel "toseguido" y en una pequeña "catilla" sembramos los dientes de ajo y justo los tapamos con la tierra justa, "quizir", no hundirlos mucho, y siempre colocados de punta,  una vez hecha la "tabla", a regar, ese riego va a depender de las necesidades, y de como veamos la tierra, o como nos de la gana, que para eso somos de Corella, pero a partir de Marzo cada 15 días es lo obligatorio.


"Ajo crudo y vino puro, pasan el puerto seguro".
 Como siempre la aparición de "yerbas" por desgracia es obligatorio, así que sacamos a pasear a nuestra "Vineta" desde muy temprano para mantener limpio el cultivo. Comenzamos a tratarlos cuando a la planta le han salido 4 hojas, eso porqué, secreto también, ahí toca echar insecticida, y cuando se ha formado el tallo, otra tanda de insecticida. Lo que mas guerra da es la "La Roya" y "El Taladro", cada 15 días y a partir de Marzo habrá que tratar con Sulfato de Cobre la plantación.

"Por San Pedro, se arranca el ajo y se siembra el puerro".
La recolección es durante el mes de Julio y dependiendo de la época de siembra, se cogen uno a uno, con mucho cuidado, se dejan encima de la tierra para que se "joreen" y después se colocan en "barquillas", luego se transportan a donde tengas previsto dejarlos secar y que no te los quiten, el secado lleva días, no hay que precipitarse, se tienen que solear con ganas, antiguamente se dejaban solear en las aceras de las casas, imagen esta muy típica de Corella, estas solían verse llenas de manojos de Ajos secandose al sol.

"Enrrastrando" Miguel El Izal

La mejor manera de guardar los Ajos es en "rastras",  no había vecino que no supiera hacer una como Dios manda, las mujeres mas expertas y con manos mas hábiles que los hombres eran las que en realidad las hacían. En todas las casas había el típico "banquillo" de hacer las "rastras" de los ajos, herramienta versátil, ya que a las noches servia para sentarse a la "fresca", conversar y contar "chascarrillos" con los vecinos, o como elemento disuasorio en las broncas del barrio. Recuerdo perfectamente a mi abuelo y mi abuela haciendo las "rastras" de ajos sentados en el suelo como al resto de los vecinos, una vez hechas a colgarlas donde siempre.


"Tan sano es el trabajo, com en la sopa el ajo"

Para hacer las "rastras" era necesario que el ajo estuviera bien seco, después había una maza especial para "escachar" el tallo del ajo y así hacerlo mas manejable a la hora de confeccionar dichas "rastras". Todo un arte. Sentados en el suelo y el banquillo vuelto al revés, este tenía una hendidura en ambas patas que facilitaban la colocación de las "rastras" y la sujeción de las mismas.

Por desgracia en la actualidad esta tradición se ha ido perdiendo, raro es ver a alguien del pueblo hacer una "rastra" de ajos, puede que algún abuelete o abuela "mañosa" todavía las haga, pero acabará perdiendose esta tradición en su totalidad.

"Los Hermanos Izal" de Corella llevan toda la vida en el cultivo del ajo y en su comercialización, de ese modo han sido y son la tarjeta de visita de nuestro pueblo a la hora de hablar del Ajo, el Ajo es de Corella y no hay nada tan bueno como nuestro Ajo.

Desde aquí mi pequeño y sincero homenaje a todos los vecinos del pueblo de Corella que a lo largo de muchos y muchos años han sabido mantener, cuidar y potenciar el cultivo del Ajo de Corella, en particular a Los Hermanos Izal que han sabido hacer de este tubérculo su modo de vida, eso ha repercutido para que Corella siga siendo considerada La Ciudad del Ajo.

Muchas Gracias por vuestro seguimiento y comentarios